Alrededor del 70 % de afectados de fibromialgia sufre de dolores en el pecho y en el tórax como consecuencia de la costocondritis.
Se trata de una inflamación del cartílago que une las costillas con el esternón, y cuando se manifiesta el dolor, es muy frecuente confundirlo con el originado por ciertos problemas cardíacos.
Síntomas de la costocondritis:
Síntomas de la costocondritis:
- Dolor agudo muy similar al que se produce durante un ataque al corazón.
- Empeora tras realizar esfuerzos, respiraciones profundas o estornudar.
- Disminuye con respiraciones lentas y reposo.
- El dolor se irradia a la parte posterior del cuello y hombros.
- Aparece y desaparece según el día.
- Afecta al tramo de costillas situado entre la 2.ª a la 5.ª.
- Dificultades para mover la parte superior del cuerpo.
- Frecuencia cardíaca rápida.
- Ritmo cardíaco irregular.
- Dificultad para respirar.
No se sabe cuál es la relación entre ambas enfermedades, pero los fibromiálgicos son propensos a padecer la costocondritis, que se agudiza por otros dolores propios de la fibromialgia.
De todos modos, si se tienen dichos síntomas, siempre hay que acudir a un médico para descartar problemas cardíacos. Una vez descartados estos, se trata como cualquier otra inflamación (hielo, antiinflamatorios).
Hay diferentes pautas que se pueden seguir si el dolor es muy fuerte:
-Evitar episodios de estrés y descansar para reducir sus efectos.
-Evitar actividades que provoquen tensiones.
-Alternar bolsas de hielo con bolsas de calor húmedo durante 20 minutos.
-Baños calientes, en momentos clave, para relajar los músculos.
-Masajes que ayuden a aflojar los músculos del cuello y hombros.